El aumento de asentamientos ilegales en la Cañada del Fenollar está deteriorando la convivencia entre sus vecinos. Una organización de especuladores está comprando terrenos rústicos y ramblas a precios de mercado de alrededor de 3€ por metro cuadrado, parcelándolos y segregándolos ilegalmente, y vendiéndolos a 18€ por metro cuadrado.
Las fincas son adquiridas por un número determinado de personas físicas o jurídicas, equivalente al número de parcelas en que se va a dividir el terreno. Luego, se reparten estas parcelas de forma privada, aunque todos figuran como propietarios de todo el terreno. Esta práctica no despierta sospechas ante el notario, y parece una transacción legítima, facilitando la venta a los nuevos compradores que acuden a la notaría para formalizar la compra.
El propósito especulativo de estas transacciones es obtener un retorno de 18€ por cada 3€ invertidos, logrando un beneficio de 15€ por metro cuadrado comprado y vendido. Un porcentaje de beneficios que supera con creces las expectativas de los mejores brokers o agentes inmobiliarios. Además, la alta demanda facilita las ventas, ya que muchas personas están dispuestas a adquirir su propia parcela por unos 14.000€ o incluso 9.000€, convirtiéndose en propietarios.
Aunque parece una solución al problema habitacional, en realidad es un negocio turbio y engañoso.
Testimonios de compradores indican que, al momento de pagar la señal, todo parece prometedor. Se les asegura que podrán instalar una vivienda de madera o una infravivienda tipo caravana, contenedor o remolque de camión, y que en pocos meses tendrán acceso a agua y electricidad. Sin embargo, después de pagar una señal de 500€ o 1000€, comienza la pesadilla. Las autoridades locales y Seprona informan a los compradores que no pueden realizar ninguna construcción, ni siquiera instalar vallados internos o fosas sépticas. Muchos solicitan la devolución de la señal, pero según los últimos afectados que han contactado con esta asociación, no se les devuelve el dinero. Ante la perspectiva de un costoso pleito, prefieren perder lo entregado como señal y arras.
Para esta organización, todo es beneficio. Si concretan la venta, obtienen un 500% de ganancia, y si el comprador se retracta, se quedan con la señal de 500€ o 1000€.
Hemos observado anuncios en otras provincias ofreciendo parcelas entre 9.000€ y 14.000€, atrayendo a muchos interesados, ya que a simple vista parece una operación fantástica y una solución habitacional. Además, el éxito de esta organización ha inspirado a otros propietarios de terrenos rústicos o ramblas a seguir el mismo procedimiento, troceando y parcelando ilegalmente terrenos para venderlos a precios mucho más altos.
En las imágenes adjuntas a este artículo, pueden ver nuevos terrenos que están saliendo a la venta bajo estas condiciones.
