Las infraviviendas siguen proliferando sin control ante la inacción del Ayuntamiento
Los asentamientos ilegales en las partidas rurales de Alicante continúan creciendo sin cesar. Chabolas, caravanas, contenedores adaptados, mobil homes y casas de madera prefabricadas se instalan en terrenos rústicos y en ramblas, muchas veces sin ningún tipo de control ni planificación urbanística.
Desde la Asociación de Vecinos de la Cañada del Fenollar hemos vuelto a denunciar el avance de nuevas construcciones, ahora con bloques y cimentaciones de hormigón, lo que indica una consolidación del problema. En concreto, en zonas como Río Mundo, Río Duero y el Camino de San Vicente a Agost, entre otras, los asentamientos siguen expandiéndose sin interrupción.
Ausencia de medidas y falta de intervención municipal
A pesar de las reiteradas denuncias vecinales, no se han tomado medidas contundentes. Los vecinos afirman que no hay presencia de precintos ni cintas negras, lo que demuestra la inacción del Ayuntamiento, que hasta el momento solo ha emitido promesas vacías sin ninguna acción concreta.
Ante esta situación, la única esperanza de los residentes está puesta en la Guardia Civil – SEPRONA y la Fiscalía de Medio Ambiente, que continúan investigando y trabajando de manera paralela al Ayuntamiento. Sin embargo, la falta de colaboración por parte del Consistorio dificulta la resolución del problema.
Un problema de desorden urbanístico y riesgo medioambiental
El crecimiento descontrolado de estos asentamientos representa un grave problema de desorden urbanístico y deterioro ambiental. Además, la instalación de viviendas en zonas de ramblas supone un riesgo extremo para sus ocupantes.
“Si se produjera una DANA como la ocurrida en Valencia, nos encontraríamos ante una situación catastrófica. Y en caso de haber víctimas, esta asociación responsabilizará a la inacción del Ayuntamiento y su permisividad con los asentamientos ilegales”, advierten desde la Asociación de Vecinos.
Exigencia de actuación municipal inmediata
Los vecinos reclaman que el Ayuntamiento, en lugar de mirar hacia otro lado, ordene a su departamento jurídico personarse en las denuncias presentadas ante la Fiscalía y colabore con la justicia para frenar el avance de los asentamientos ilegales.
La asociación insiste en que la degradación del territorio y la falta de planificación urbanística no solo afectan a la calidad de vida de los ciudadanos, sino que ponen en peligro a quienes se asientan en zonas inundables, generando un riesgo humano y medioambiental inaceptable.
🔎 Desde la Asociación de Vecinos de la Cañada del Fenollar exigen soluciones urgentes y acciones concretas para frenar este problema antes de que sea demasiado tarde.